¿Por qué me salió ACNÉ?

¡Hola a todo el mundo!

Como os he comentado antes en una entrada muy express, os quiero hablar de mi experiencia con el acné. Primero de todo quiero comentar un poco por encima lo que me ocurrió y porqué me salió acné, con una edad ya tardía.

Siempre he sido una niña con piel de porcelana y de pequeña nunca he tenido problemas de acné, cuando mis amigas tenían granitos yo seguía teniendo mi piel intacta y llegué hasta mis 19 años sin prácticamente ningún grano, quitando alguno pre y post-menstrual.

¿Qué pasó entonces para que tuviera acné?

El caso es que tenía exceso de queratina en mi piel, una proteína que tenemos en la piel, uñas y cabello pero que un exceso de esa proteína puede crearnos problemas en nuestra piel como son los granos llamados milium. Estos granos o bultos en la piel son poros obstruidos que se forman en cápsulas blanquecinas que se ven en la capa más superficial de nuestra piel. 

Así pues, mi rostro era angelical con una piel lisa pero con milium. Mis padres me dijeron que no pasaba nada, pero a la vez que iba creciendo iba dándome cuenta de que debería ir a una esteticista para que me eliminara los milium, y mi tía que tenía una amiga que era esteticista decía que era buenísima por tanto me la recomendó y, finalmente, la llamé y concerté una cita con ella. 

A finales del 2010 me acerqué a su casa, donde tenía la consulta, y me hizo una limpieza facial profunda de todo lo que tenía en mi piel (milium y algún que otro punto negro, nada del otro mundo). Después de esa limpieza me recomendó la crema de NATURA BISSÉ llamada OXYGEN CREAM.

Esta crema, con un coste de 40€ (para mi es bastante excesiva de precio), me explicó que eliminaría todos mis granos milium restantes y limpiaría mis poros para reducirlos más (más aun...). La utilizaba durante la mañana y la noche. En un primer momento no tenía problema, no veía ningún cambio en mi piel, pero todo llego un mes o así después...

Mamá, ¿por qué tengo tantos granos?

Después de un mes y poco, mi cara empezó a cambiar. Dejó de lado esa piel tersa, lisa y con mínimos granos, a una piel llena de bultos, granos internos, espinillas por todos lados, por la frente, pómulos y por cada hueco de mi cara. Estaba derrumbada, me sentía distinta y triste porque jamás había tenido problemas de acné, ni nada por el estilo. Mi madre me vio y decidió que era momento de no seguir con esa dichosa crema que solo me había traído más que problemas, así que la deseché y comencé a usar crema hidratante normal de Nivea que tenía por casa.

Pasé de esta piel...

...a esta otra.

No sé si se aprecia bien, pero como podéis ver mi piel cambió radicalmente ese mismo año. Pasé de no tener nada a tenerlo todo, mi novio no sé ni como no me dejó por fea, pero realmente me apoyó siempre en todo momento y junto a mi madre, ellos fueron mis dos grandes pilares. 

Poco después de esta barbarie, mi madre me llevó al dermatólogo y comencé a tratarme con cremas con clindamicina y ácido salicílico y glicólico. 

Productos como:

• Tensoderm glicólico.

• Gel limpiador de Bactopur.

• Cremas con Clindamicina como Duac Gel.

Todas costaban un ojo de la cara, creo que aproximadamente todas salian a unos 70€ y su duración era de 2 meses o así; además, los resultados no fueron los esperados después de casi 2 años, así que decidí dejarlos y mirar por internet.

Mi piel tras el uso de las cremas recetadas por el dermatólogo.

Hasta aquí puedo leer... este es el principio de mi historia del acné, en la siguiente parte contaré la gran búsqueda de productos que me ayudaron o que no me ayudaron tanto y muchas más cosas.

Espero poder ayudaros con mi experiencia que quiero relatar aquí, me lleva mucha faena explicar todo con gran detalle y mi principal objetivo es que teniendo acné sepáis que no pasa nada, es algo normal y lo mejor es aceptarlo, luchar y querernos a nosotras mismas (nosotros mismos también).

¡Todo tiene solución! Pensad positivo.

Espero veros en mi próximo post.